Secuencian el genoma de dos cepas del parásito que causa la enfermedad de chagas

Secuencian genoma el parasito de la enfermedad de chagas
En la foto de archivo un ejemplar de la “chinche picuda”, animal transmisor del mal de Chagas, más conocido como la enfermedad de los pobres

Investigadores de la Universidad Autónoma de Madrid (UAM) han secuenciado y ensamblado dos nuevos genomas del parásito Trypanosoma cruzi, causante de la enfermedades de Chagas, una de las más desatendidas del planeta.

Los resultados, publicados en Scientific Reports, ayudarán a avanzar en la investigación de esta enfermedad.

Según la Organización Mundial de la Salud, la enfermedad de chagas es una de las principales causas de muerte en América Latina -entre 20.000 y 50.000 fallecimientos anuales-.

Además, se estima que hay 25 millones de personas en riesgo, en zonas endémicas y no endémicas, lo que incluye a casi todo el continente americano y parte del europeo.

De momento no existe cura y los fármacos disponibles suelen causar efectos secundarios que obligan a los pacientes a abandonar el tratamiento.

Desde que en 2005 se publicó la primera secuencia genómica de Trypanosoma cruzi, los científicos han encontrado una gran variabilidad genómica entre las cepas de este parásito pero solo unos cuantos genomas han sido secuenciados.
Ahora, gracias a las nuevas tecnologías de secuenciación masiva y de análisis bioinformático, un equipo de la Universidad Autónoma de Madrid ha podido ensamblar -a partir de millones de secuencias y a manera de un gran puzle- dos nuevos genomas de Trypanosoma cruzi, logrando extraer su información y significado biológico.

Los dos nuevos genomas, descritos en Scienitific Reports, se corresponden a cepas de gran interés científico.

“Una de las cepas está relacionada con altos niveles de virulencia. La otra es una cepa híbrida asociada a transmisión vertical de la enfermedad (Bug2148)”, declaran los autores.

“Esta comparativa genómica -agregan- nos permitió identificar los grupos genéticos más probables asociados al desarrollo de la enfermedad y al proceso de infección, así como la identificación de familias proteicas expuestas a constante evolución que confieren al parásito una ventaja biológica ante el desarrollo de fármacos”.